¿Y tú te das amorcito con algún propósito o solo por diversión? Recuerda que masturbarse ayuda a dormir, te permite hace una pausa antes de seguir con tus actividades o simplemente sirve para dejar de estar cachond@ y puedas concentrarte y seguir con el día a día. Sin embargo no olvides que la masturbación es un ejemplo de amor propio y autocuidado.
¿Cuándo fue la última vez que te masturbaste por diversión? Solo tú, disfrutando de tu cuerpo sin otra razón más que acariciarte.
El autocuidado puede tomar muchas formas: Puede ser un baño largo, hacer la cita con el dentista que has estado posponiendo, disfrutar de un pasatiempo, decirle no, a algo que realmente no tienes tiempo para hacer o puede ser la masturbación.
El autocuidado es una forma de ser bueno con la persona más importante en su vida: TU. Y te mereces un regalo: Tiempo para que te concentres puramente en tu placer. Sin embargo, ¿cómo manejas eso?
Tómate un tiempo para ti.
Definitivamente es más fácil decirlo que hacerlo, pero cuando las cosas son importantes, se les da tiempo. Así que date tiempo para ti. Eres muy importante y no puedes hacer todas la cosas que haces por los demás si estás vacío.
Hacer espacio para la masturbación.
Es posible que no desees encender velas y extender pétalos de rosa sobre la cama, pero puede que sí. Haz lo que quieras para que la masturbación sea un placer. Es posible que desees meterte en la cama el día en que cambies las sábanas, o tal vez prefieras acurrucarte en el sofá debajo de tu manta más cómoda.
Puede ser que, estar detrás de la puerta cerrada del baño funcione mejor para ti. Diviértete en el baño o en la ducha. Encuentra un lugar que te funcione y acariciate lo más cómodo (o incómodo si es lo suyo) como sea posible.
Hacer el amor contigo mismo
Tal vez no te guste esta frase, pero es el punto principal del amor propio como cuidado personal. Masturbarte porque quieres y sin otra razón. Para conectarte con tu placer y sumergirte completamente en él.
Masturbación consciente
Las actividades de atención plena son asuntos que involucran a tu cerebro en lo que está haciendo en ese preciso momento para que otras cuestiones no lo distraigan. Convertir la masturbación en un acto de atención plena y consciente de amor propio no es tan difícil como parece, le traerá muchos beneficios a tu psique y a tu cuerpo.
Los preparativos
Prepara lo que necesites: Lubricante, aunque creas no necesitarlo, siempre es bueno tenerlo cerca. Ten a la mano tu juguete sexual favorito o tal vez tengas varios y puedes probar el que mejor te funcione en ese momento. Prepara varias opciones para que no tengas que detenerte a mitad de camino para encontrar lo que necesitas.
Fantasea
Sumérgete en tu fantasía favorita, ya sea con la imaginación o a través del porno o la erótica. Encuentra una manera de ocupar tu mente con pensamientos estimulantes que te prendan y entonces sí da rienda suelta a tus deseos más profundos.
Como con cualquier acto sexual, recuerda el cuidado posterior. Tómate un tiempo para descansar y disfrutar del brillo posterior al juego. Consigue una bebida o algo rico que disfrutar, tal vez un abrazo si lo necesitas. El darte cariño es autocuidado y todo tu cuerpo, mente y alma te lo agradecerán y por supuesto los que te rodean.
